El viernes pasado, la Cámara Federal porteña, con las firmas de los jueces Mariano Llorens, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi, sobreseyó a Macri y a los exjefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, tras considerar que las tareas de inteligencia a los familiares de los tripulantes del submarino no habrían sido ilegales, sino que constituyeron maniobras para proteger la seguridad presidencial.
Los jueces de la sala primera del tribunal de apelaciones consideraron que no se cometió delito alguno en la producción de informes de inteligencia en los que se incluyó información de los familiares de las víctimas del submarino que se hundió en 2017 y vincularon la “actividad desplegada” con la seguridad presidencial.
“Cuando la causa se pasó a Comodoro Py la causa se preveía que esto podía suceder. Mientras los jueces amigos protegen a Mauricio Macri, nosotros seguimos con el dolor y la duda de lo que realmente ocurrió”, expresó Susana Coria, mamá de Fabricio, el único sanluiseño de la tripulación que murió en noviembre de 2017, tras el hundimiento del ARA San Juan.