La universidad también había diseñado un algoritmo para estimar cuándo crecen los casos de Covid-19 y evitar el aumento de contagios.
Así como el coronavirus fue imponiéndose a un ritmo cada vez más acelerado y sin precedentes cuando mediaba la pandemia, también la tecnología junto a los avances de salud se fueron poniendo a la par con el objetivo de encontrar métodos rápidos y eficaces que intervengan en la lucha contra el Covid-19.
En esta oportunidad, un nuevo aporte fue desarrollado en la Universidad de San Martín (UNSaM). Se trata de la producción de un test rápido para detectar casos positivos en quienes se encuentren transitando la enfermedad.
De esta manera, el test se resume en tres simples pasos: un pinchazo en el dedo, una gota de sangre como muestra y diez minutos de espera para obtener los resultados. El proyecto, que ya puede ser adquirido por los centros de salud que trabajan diariamente para combatir la pandemia, contó con la participación de la UNSam, la Universidad de Buenos Aires y la empresa biotecnológica argentina Chemtest.
Universidad de San Martín
Otras de las características que presenta está innovación es que permitirá detectar anticuerpos en personas asintomáticas, es decir, quienes puedan llegar a tener el virus activo en el cuerpo, pero no presentan síntomas compatibles con la enfermedad podrán conocer su estado a través del test.
Denominado con el nombre de Chemstrip Covid19 IgM/IgG, este test ofrece resultados cualitativos en 10 minutos que, tras aplicar una gota de sangre, suero o plasma en dos tiras reactivas en formato tarjeta, detectan anticuerpos de aparició temprana (IgM) o de apariciónn tardía (IgG). Además ya cuenta con la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT).
Según informaron desde la compañía Chemtest, esta prueba “es ideal para diagnosticar casos sintomáticos, convalecientes (recuperados) o vacunados y también pude detectar la presencia de anticuerpos anti-SARS-Cov2 en personas asintomáticas”.
También explicaron que para el diseño de este kit se incorporaron “antígenos recombinantes desarrollados por el Instituto de Investigaciones Biotecnológicas de la Universidad Nacional de San Martín”. Y se precisó la colaboración de “dos facultades de la Universidad de Buenos Aires: Farmacia y Bioquímica, y Ciencias Exactas y Naturales”.
Chemtest es la empresa que colaboró, junto con la Universidad de Buenos Aires y la UNSaM, en desarrollar el test rápido que ofrece resultados en diez minutos.
En base a los avances para combatir la pandemia, el Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza anunció que el año próximo el país contará con vacunas argentinas en Fase 1 y 2. “Es un avance muy importante para nuestro país porque demuestra que estamos preparados para desarrollar vacunas de este tipo “.
El proyecto está encabezado por la UNSaM y el Conicet y, hasta quince días, se encontraba en el proceso final de la fase preclínica. “Es de proteína recombinante, y ya está terminando la fase preclínica, que son los ensayos en animales, pero ya con la proteína fabricada por un laboratorio nacional, que es Cassará, que está asociado”, detalló el funcionario.
La Universidad de San Martín junto al Conicet están desarrollando otra vacuna Argentina para el 2022. La primera se trata de la versión local de Sputnik V, que el próximo año se producirá íntegramente en un laboratorio de Pilar. Foto: Orlando Pelichotti
Sin embargo, el desarrollo del test rápido no es el primer aporte que realizan desde la universidad de la zona norte bonaerense en el marco de la pandemia.
En marzo de este año, anunciaron el diseño de un algoritmo, que es utilizado por el Ministerio de Salud bonaerense, y con el cual se puede estimar cuándo están aumentando los casos de Covid-19 en un área determinada de las ciudades, para así adoptar decisiones que eviten el aumento de contagios.
Dicho algoritmo funciona de la siguiente manera: cuando una persona tiene síntomas compatibles con el virus, puede llamar al 148. Allí los operadores responden y registran los detalles de cada llamado. Pero gracias a esta creación las autoridades sanitarias ahora también pueden estimar con hasta cinco días de anticipación la curva de casos confirmados por laboratorio.
Otro detalle no menor es que en la compañía biotecnológica Inmunova, que funciona en el campus de la UNSaM, también se desarrolló -junto con la ayuda de otros centros científicos públicos y privados- un suero hiperinmune anti Covid-19, el cual es distribuido en hospitales, clínicas y sanatorios.
Se trata de una inmunoterapia cuya capacidad neutralizante del virus SARS-CoV-2 lo bloquea y evita su propagación. Además, tiene la ventaja de que puede producirse rápido y en gran esca