El hallazgo se produjo en inmediaciones al kilómetro 160 de la ruta provincial 46, cerca de la localidad de Andalgalá
Este martes pasado, en las inmediaciones de la localidad de Andalgalá, provincia de Catamarca, las autoridades policiales hallaron restos óseos humanos. Se investiga si pertenecen a María Eugenia Olivera, la mujer que fue vista por última vez el 16 de julio pasado y por cuya desaparición fue detenida su ex pareja ante la sospecha de que se trate de un caso de violencia de género.
El hallazgo se produjo en el kilómetro 160 de la ruta provincial 46, en cercanías a la mencionada localidad catamarqueña, por efectivos de la División Homicidios de la policía provincial.
Esta investigación se inició el lunes pasado a raíz de una publicación a través de la red social Facebook. Los efectivos de la comisaría departamental de dicha jurisdicción tomaron conocimiento sobre la situación de Olivera, quien se encontraba desaparecida desde hacía más de dos meses y sobre quien no había una denuncia realizada para la búsqueda de su paradero.
La publicación, que realizó una amiga de la víctima en esa red social, decía: “Ella es una amiga de la infancia de Tucumán. María Eugenia Olivera vive en Catamarca, Andalgalá. Supuestamente dicen que viajó a Tucumán para visitar amigas, otros, que vino a buscar empleo pero su última conexión de WhatsApp fue el 16 de julio. Nunca más escribió. Desde julio no se sabe nada de ella, aquellas personas o amigos cercanos que la hayan visto o estado con ella por favor comunicarse conmigo por MP. Tiene 3 hijos y jamás los dejaría solitos. Gracias”.
A partir de ello, los policías iniciaron actuaciones de oficio para determinar la veracidad de los hechos, procedieron a entrevistar a la ex pareja de la mujer –madre de sus tres hijos- y, ante las confusas explicaciones brindadas, avisaron a la fiscal interviniente. Esta última dispuso el arresto del sospechoso, que se concretó el último lunes.
Según informó Télam, el detenido, identificado por la policía como Eliseo Guerrero, no reportó la ausencia de la mujer y es el principal sospechoso por su desaparición, precisaron los pesquisas.
De acuerdo a lo publicado por el diario local El Ancasti, en el allanamiento a la vivienda del detenido se pudo encontrar los documentos de la presunta víctima además de sus tarjetas bancarias de cobro. De acuerdo a propios dichos, Olivera había salido de viaje.
Por su parte, una amiga de la mujer desaparecida en diálogo con medios de la zona refirió que hacía más un año y medio que la pareja se había divorciado y agregó: “Ella una vez me contó que él la había amenazado de muerte y eso fue en el mes de junio”.
Según su testimonio, Olivera se comunicó con ella por última vez durante julio último, cuando le envió un mensaje de voz en el cual le contaba que estaba siendo hostigada por su ex pareja.
Frente a lo sucedido, la fiscal de la causa Soledad Rodríguez prevé una inmediata imputación al ex marido de la víctima, quien se encuentra a disposición de la Justicia.
Consultada sobre la calificación del hecho y el grado de la acusación, la fiscal remarcó: “No quiero adelantar nada, pero se dan todos los elementos del contexto de violencia de género”.
Finalmente, fuentes judiciales indicaron que “en la jornada del miércoles los investigadores encontraron en la zona de rastrillaje un anillo y aritos que están siendo cotejados para determinar si pertenecen a Olivera”.