Sharbat Bula pidió salir de Afganistán luego de la toma del poder por los talibanes.
Los ojos verdes y la mirada profunda de Sharbat Gula conquistaron al mundo en 1985. Su retrato conocido como “Niña afgana” salió en la portada de la edición de junio de National Geographic. En aquel momento, sin saberlo, se convertiría en la refugiada más famosa del mundo.
Hoy en día, Gula salió de Afganistán y se refugió en Italia tras la llegada al poder del ejército talibán. “La ciudadana afgana Sharbat Gula acaba de llegar a Roma”, anunció el jueves en un comunicado la jefatura de Gobierno.
Sharbat Gula, que ahora tiene 49 años, pidió salir de su país tras la toma del poder por los talibanes en agosto y el Gobierno italiano “facilitó y organizó” su traslado a Italia, como parte del programa para la evacuación de ciudadanos afganos y el plan para su recepción e integración, explica el comunicado. La foto de hace tres décadas “llegó a simbolizar las vicisitudes y los conflictos de esa etapa histórica que atravesaba Afganistán y su pueblo”, según la oficina de prensa del primer ministro Mario Draghi.
Sharbat tenía 12 años cuando fue fotografiada por Steve McCurry. Era 1984. Se encontraba en el campo de refugiados Nasir Bagh, en Pakistán, por la guerra que se vivía en su país entre locales y soviéticos.
La imagen tomó una repercusión inusitada debido a su enorme carga simbólica y a la mirada única de su personaje. Con el objetivo de dar a conocer la historia de la joven, fotógrafos de National Geographic la buscaron incesantemente durante más de una década.
Existe una película titulada Orígenes en la que el protagonista se basa en un estudio profundo de ojos para hallar algo así como el alma gemela de su novia fallecida por un cruento accidente de ascensor.
Sin nada que perder, el personaje añora saber quién tiene el iris exacto de su ex pareja y sabe que aquella persona puede estar en cualquier lado del planeta.
Los periodistas no la tenían tan difícil como el pobre hombre de la película, pero llevaron adelante una búsqueda similar. En 2002 viajaron a Pakistán y un señor que conocía a su hermano les dijo que la había localizado.
Entonces dieron con dicha mujer y el profesor de visión por computadora y reconocimiento de patrones en la Universidad de Cambridge John Daugman usó un software de reconocimiento de iris y comprobó científicamente que se trataba de la “niña afgana”.
Gula vivía en un pueblo remoto de Pakistán junto a su marido panadero y sus tres hijas. Cuando le mostraron su foto ella no tenía ni idea de que su cara se había hecho famosa mundialmente.
Aquel año le hicieron una entrevista y le sacaron un nuevo retrato para hacer el famoso antes y después.
En 2016, Sharbat fue noticia porque la detuvieron por llevar documentos falsos. Dijo que lo hizo para educar a sus hijos (tuvo un niño más) y para vender su casa, cosas que no eran posibles sin una tarjeta identificatoria.
La llevaron a la cárcel unos días, contrajo hepatitis C y la deportaron a Afganistán, país donde nació y vivió su infancia. “Estábamos bien allá, teníamos buenos vecinos, vivimos con nuestros hermanos pastunes. Pero no me imaginé que al final el Gobierno paquistaní me iba a tratar de esta manera”, comentó en su momento.
Cuando volvió a Afganistán, el ex presidente Ashraf Ghani (hoy derrocado por el ejército Talibán) la recibió cálidamente en el palacio de gobierno y le prometió apoyo financiero y una casa en Kabul.
Tras su arribo se conoció que tuvo que vender su casa del país limítrofe por miedo a que la arrestaran y que su esposo e hija mayor habían muerto a causa de lo que ella padecía. Gula recibió al año siguiente una casa y un estipendio de 700 dólares por mes para gastos médicos y de vida.
“Quiero crear una organización de caridad o un hospital para ayudar a todos los pobres, huérfanos y viudas. Quisiera que hubiese paz en este país para que no hubiese gente sin hogar. Dios componga este país”, declaró.
El nuevo Afganistán
La situación de la “niña afgana” en el Afganistán talibán acaba de terminar. Su partida y arribo a Italia es una clara muestra de ello
Italia fue uno de los varios países occidentales que sacaron por aire a cientos de afganos del país tras la salida de las fuerzas estadounidenses y la toma del poder por los talibanes en agosto.
El 15 de ese mes, el ejército Talibán tomó la capital y terminó de derrocar a la República Islámica de Afganistán. Ghani, quien había asistido a Gula, y su vicepresidente Amrullah Saleh se fueron del país ante la llegada de los militares extremistas.
El Talibán es un movimiento islamista de corte religioso radical y violento que estuvo en el poder afgano de 1996 a 2001. Venía controlando la mayor parte del territorio asiático incluso antes de la caída de la República.
En septiembre de 2020 se creyó que el gobierno y el Talibán habían llegado a un acuerdo para combinar sus visiones del Estado Islámico, pero parece que aquellas negociaciones no prosperaron.
Desde el 15, los talibanes realizaron evacuaciones a gran escala de civiles, funcionarios gubernamentales y diplomáticos extranjeros a través del Aeropuerto de Kabul que estaba controlado por las fuerzas de Estados Unidos.
Ghani se exilió a Emiratos Árabes Unidos. Foto: REUTER