El Consejo de Fútbol empieza a trabajar en el próximo mercado de pases. Qué jugadores tienen chances de llegar al Xeneize
A Boca Juniors le restan disputar entre seis y siete partidos trascendentales para un objetivo mayor: clasificarse a la Copa Libertadores 2025. Las vías son dos: hacerlo mediante la Tabla Anual, donde tiene poco margen de error ya que pelea contra varios rivales directos (hoy no estaría alcanzando el objetivo), o bien ganar la Copa Argentina, donde debería eliminar a Vélez Sársfield el próximo miércoles en Córdoba por las semifinales y luego imponerse ante Central Córdoba de Santiago del Estero en la final. Aunque los dirigidos por Fernando Gago tienen mucho por jugarse, el Consejo de Fútbol ya empieza a trabajar en el próximo mercado de pases.
Existen varios nombres que se instalaron en el Boca Predio y la Bombonera en las últimas semanas, pero algunos de ellos son descartables. Hay indicios de negociaciones reales que podrían llegar a buen puerto, pero hasta ahora los protagonistas no muestran todas sus cartas. Fernando Gago no hará referencia a posibles refuerzos ni sectores de la cancha a reforzar por respeto a su plantel. En tanto, habrá que aguardar por el poder de decisión que tendrá el flamante DT teniendo en cuenta las últimas declaraciones del saliente, Diego Martínez, quien dejó entrever que era el Consejo quien definía los apellidos para incorporar.
UNO POR UNO, LOS POSIBLES REFUERZOS DE BOCA JUNIORS
BRAYAN CORTÉS: Arquero chileno de 29 años que acaba de ser campeón con Jorge Almirón en Colo Colo. Tiene una cláusula de salida que asciende a 2.500.000 dólares, según informaron medios chilenos. Podría ser alternativa siempre y cuando Sergio Romero, relegado en la consideración de Fernando Gago, se marche del club. Chiquito tiene contrato hasta fines de 2025.
SERGIO RAMOS: Un sueño casi imposible. Fue compañero de Fernando Gago y trascendió que hubo contactos, aunque a Infobae le desmintieron que sea factible. Terminó la temporada pasada con Sevilla y está sin club hace varios meses. En algún momento declaró que le encantaría jugar un partido en la Bombonera. Fue uno de los mejores defensores centrales de la historia contemporánea, pero en marzo cumplirá 39 años.
JUAN FOYTH: El campeón del mundo admitió en algún momento que era hincha de Boca cuando era chico y eso motivó a la especulación. El defensor de apenas 26 años pertenece al Villarreal, de ligazón con Juan Román Riquelme, y tuvo una mala racha de lesiones en el último tiempo (hoy se rehabilita de una dolencia de rodilla). Por ahora, inviable: el futbolista pretende continuar en Europa un tiempo más.
VALENTÍN GÓMEZ: Central zurdo de Vélez, que sonó en otro momento en Boca y estuvo a punto de firmar en River en el último mercado. Aunque es del gusto del Consejo de Fútbol, a Infobae le confiaron desde Vélez que “a Boca no se lo venden”. Otro de los jugadores que Gago deberá tachar.
TOMÁS PALACIOS: Es defensor central, tiene 21 años, se formó en Talleres de Córdoba y fue transferido desde Independiente Rivadavia de Mendoza al Inter de Milán, donde debutó a fines de octubre. Sin tanta continuidad, podría ser liberado a través de un préstamo. Tiene excelente técnica y criterio con la pelota pese a medir 1,96. Es una de las apuestas que podría gestarse en el siguiente mercado y podría ser alternativa a Marcos Rojo como segundo zaguero central. En observación.
LEANDRO PAREDES: Lo que parecía un sueño que estaba a punto de concretarse, se frenó. El croata Ivan Juric se alejó de la conducción técnica de la Roma y ahora agarró el italiano Claudio Ranieri, quien tendría en cuenta al jugador de la selección argentina de cara al futuro. Paredes tiene vínculo hasta mitad de año y en más de una ocasión adelantó que su deseo es retornar al Xeneize en óptimas condiciones físicas. Tiene 30 años y será padre nuevamente en los próximos meses. En los últimos contactos que tuvo con la prensa, negó que haya recibido un llamado de Gago. Para Riquelme, las cartas están echadas: Román le avisó que no molestará y la puerta del club está abierta para cuando él decida retornar.
ANÍBAL MORENO: Un viejo conocido de Fernando Gago, quien lo dirigió en Racing y lo tiene en carpeta. El surgido en Newell’s pertenece al Palmeiras, que a priori no tiene pensado largarlo. Para negociarlo, los paulistas pretenden una cifra aproximada de 14 millones de dólares, descabellada hasta para uno de los más poderosos de Argentina como Boca. Pinta muy difícil.
LEONARDO GIL: “Mi representante estuvo hablando con una persona del Consejo de Boca Juniors. Sería muy lindo. Ojalá que se pueda dar. Todo el mundo sabe que soy hincha”. El volante de 33 años es otro de los futbolistas apuntados en Colo Colo, donde acaba contrato tras ser campeón. El Xeneize tendría facilidad de negociación ya que lo ficharía sin necesidad de erogar dinero al club chileno, pero no está claro si será una de las prioridades del próximo mercado.
JAMES RODRÍGUEZ: Como la selección colombiana se entrenó en el predio de Boca Juniors antes de viajar a Montevideo para visitar a Uruguay el jueves pasado, Mauricio Serna recibió a sus coterráneos James Rodríguez y Luis Díaz. Al ex Banfield le regaló la camiseta xeneize con el número 10 y lo tentó con ponérsela de forma oficial. “Quién no va a querer que James juegue en su equipo, luego de lo que hizo en la Copa América y lo que ratifica siempre en la Selección. Sería un sueño, pero no deja de ser un sueño”, fue el comentario de Chicho, entre ilusión y realismo. En el mercado pasado, River había coqueteado con sumarlo a su plantel. James está en Rayo Vallecano y no dio indicios de cambiar de equipo en el futuro próximo.
ALAN VELASCO: “No me llamó Riquelme”, aseguró el ex Independiente en una entrevista con ESPN en las últimas horas. El mediapunta de 22 años fue sondeado por Boca en el último mercado, pero desde el DC United de Estados Unidos lo declararon intransferible, según contó su directiva públicamente. Tiene contrato hasta fines de 2025, por lo que el Xeneize debería negociar con la franquicia de la MLS para contratarlo.
CARLOS PALACIOS: El chileno es una de las tratativas abiertas de Boca, que lo tentó en el último mercado y tuvo que resignarse porque estaba por disputar los cuartos de la Libertadores en Colo Colo. En consideración con su seleccionado nacional, ya avisó que no continuará en el Cacique (mantuvo diferencias con la directiva e incluso se ausentó a entrenamientos luego de que se cayera su venta). En el Xeneize están disgustados por la versión que brindó el presidente del club chileno, que deslizó que el Consejo envió una oferta cuando estaba a punto de cerrar el libro de pases. La operación podría llevarse a cabo por una suma cercana a los 5 millones de dólares.