El oficial, de 42 años, fue interceptado al llegar a su casa. Otros dos asaltantes fueron detenidos, uno de ellos de 18 años, herido.
Un oficial de la Policía de la Ciudad fue asesinado de un disparo en el pecho cuando al menos tres motochorros intentaron asaltarlo frente a su casa, en Hurlingham, donde uno de los ladrones también murió.
Según informaron fuentes policiales, todo sucedió en la noche del domingo en la calle Ernesto L. Plass al 4300, en Villa Tesei, al oeste del Conurbano.
El oficial mayor Fernando Oscar Méndez Bautista (42), que se desempeñaba en la División Disposiciones Protectivas de la Policía de la Ciudad, fue atacado cuando llegó en su moto Rouser 200 negra.
Los ladrones se movilizaban en una moto Honda 110 roja y se tirotearon con la víctima, que recibió un balazo mortal en el pecho.
Uno de los delincuentes también murió, en el hospital de Haedo, por un disparo. Dos de sus cómplices, uno de ellos herido e identificado como Nahuel Cataño (18), fueron detenidos horas después.
En la calle Pedraza al 800 -a unos dos kilómetros del sitio del enfrentamiento-, hallaron la moto usada por los delincuentes, que tenía manchas de sangre.
Fernando Oscar Méndez Bautista (42) era oficial mayor de la Policía de la Ciudad. Fue asesinado por motochorros en Villa Tesei (Hurlingham).
Por su parte, el arma reglamentaria del oficial Méndez Bautista, una Pietro Beretta calibre 9 milímetros, fue resguardada por el padre de la víctima, quien se le entregó a la Policía para que se lleven a cabo las pericias. Además, la mochila azul del agente fue hallada tirada cerca del lugar del crimen.
“Estamos cansados de estos hechos, necesitamos que alguien haga algo. Estábamos en la vereda y comenzamos a escuchar los tiros, fueron más de 10 disparos los que se escucharon, fue un susto muy grande”, le contó un testigo al sitio web Oeste Noticias.
El hombre también relató que días atrás otros delincuentes habían ingresado a una vivienda de la calle Rolland y robaron “más de 10 mil dólares y pesos en efectivo”.
Un vecino contó que escuchó más de “diez tiros” y que una de las balas impactó en su propia casa. Sobre el oficial fallecido, agregó: “Lo conozco. Es un vecino buenísimo, siempre estaba con los hijos. Tenía una nena y un varón”.
En el lugar trabajó la Policía bonaerense. Intervino en la causa la UFI en turno de Morón.