Fue este jueves en el Centro de Convenciones de Los Ángeles. Conversaron media hora.
En un inesperado encuentro, Alberto Fernández y Jair Bolsonaro mantuvieron este jueves una amable conversación en el marco de la IX Cumbre de las Américas, que termina este viernes en Los Ángeles.
La conversación duró alrededor de media hora y tuvo lugar pasado el mediodía en el Centro de Convenciones de esa ciudad de Estados Unidos. Fue siempre con los participantes de pie, una charla larga pero de ocasión. Llama la atención que los equipos de comunicación de Presidencia y Cancillería evitaron difundirlo.
Según testigos de uno y otro lado, los presidentes hablaron del Mundial de Qatar, de commodities y materias primas en el marco de la crisis mundial. También conversaron sobre la provisión de gas.
Los brasileños temen tener problemas con este recurso, y hasta Bolsonaro se quejó de la decisión de Bolivia de vender más gas a la Argentina lo que, según dijo el Presidente brasileño, podría generar faltas de este combustible en su país. Además, hablaron del gasoducto que argentinos y brasileños quieren llevar desde Vaca Muerta hasta el sur del país vecino.
Como lo muestra la foto tuiteada el jueves bien entrada la noche por el periodista brasileño Edgar Otálvora, Fernández y Bolsonaro quedaron a solas un momento, ya que casi todo el tiempo estuvieron con ellos el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el canciller Santiago Cafiero; y el embajador de Brasil en Estados Unidos, Néstor Forsters.
Según testigos, la charla se produjo espontáneamente por decisión de ambos mandatarios, cuando se saludaron en la antesala del plenario de jefes de Estado.
En cambio, el sitio online de O Estado escribió que Bolsonaro “se movió bien en la sala VIP donde estaban los jefes de Gobierno que acudieron a la Cumbre de las Américas, en Estados Unidos”. Y afirmó que “tomó la iniciativa de dirigirse al presidente argentino Alberto Fernández, con quien siempre había tenido relaciones difíciles, y los dos conversaron amigablemente durante unos 30 minutos, diez de ellos a solas”. Agregó el medio de Brasil que el encuentro estuvo a cargo del ministro de Relaciones Exteriores de ese país, embajador Carlos França.
Todo ocurrió poco antes del duro discurso que dio Fernández el jueves. Como presidente de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el mandatario argentino rechazó las exclusiones de Cuba y Venezuela de la Cumbre; criticó a Donald Trump; fustigó a la Organización de los Estados Americanos (OEA) y a su secretario general, Luis Almagro; todo frente al presidente de EE.UU., Joe Biden.
Aliado de Donald Trump, Bolsonaro tuvo su primera bilateral con Biden este jueves. En tanto, Alberto Fernández la tendrá el 25 de julio, pero en la Casa Blanca.
El encuentro con Bolsonaro no llamaría la atención si no fuera porque los mandatarios nunca conversaron. Fernández siempre priorizó su relación con Lula da Silva. De hecho, siendo presidente electo en 2019, visitó a Lula en la cárcel. Bolsonaro nunca le permitió que se involucrara en la política brasileña, aunque también es cierto que siempre fustigó al kirchnerismo.
Si bien en julio habrá Cumbre del Mercosur en Paraguay y nadie confirma que se esté armando una cita de trabajo entre Bolsonaro y Fernández, el encuentro de este jueves sirvió al menos para descomprimir una mala relación.
Con la vuelta de Daniel Scioli a Buenos Aires para reemplazar al despedido ministro Matías Kulfas en el Ministerio de Desarrollo Productivo, la Argentina estará sin embajador en Brasil hasta un nuevo nombramiento.
Aunque debería mantener este viernes una cita con Pedro Castillo y otra con Gabriel Boric, Fernández también habló este jueves con el peruano por espacio de otra media hora. Más tarde tuvo una bilateral con el canadiense Justin Trudeau y con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.